De vuelta a lo cotidiano.

Una vez finalizadas las deseadas y siempre cortas vacaciones, quiero empezar mis comentarios recordando a los cooperantes Albert Vilalta y Roque Pascual a los que felicito por su vuelta a casa y por sus declaraciones al llegar al aeropuerto de Barcelona, afirmando que se sienten "muy orgullosos" del Ejecutivo por el esfuerzo diplomático realizado para liberarlos, espero que algún día puedan reincorporarse nuevamente y de la mejor manera posible a sus labores como cooperantes.

Por el contrario, que injustas resultan las palabras de Oriol Pujol portavoz parlamentario de la coalición CiU, pronunciadas el pasado viernes en el programa “Els Matins” de TV3.: «Montilla quiere convertirnos en una gran Murcia» La esposa de Jordi Pujol, Marta Ferrusola, no ha tenido nunca inconveniente en manifestar su aversión hacia los inmigrantes. Sus comentarios relativos a la procedencia del President Montilla o a los motivos por los que sus hijos en numerosas ocasiones se habían quedado sin jugar en el parque están en la memoria de todos. Desgraciadamente estas conductas se heredan.